Una de las razas de vacuno mas reconocible, quizás por su característico pelaje negro en su totalidad. Es una de las razas autóctonas de España. Destacar su gran adaptación al medio y a condiciones en las que otras razas tardan mayor tiempo o incluso no se adapten. El rendimiento productivo es bastante bueno, aunque el ganado cruzado es mas productivo en cuanto a aumento de kilos en menor tiempo, la raza avileña tiene la característica que aunque tarda en ganar kilos también tarda bastante mas en perderlos con respecto a otras razas. Esto hace que su adaptación a condiciones no óptimas sea mejor sin presentar bajas en la cabaña ganadera.
La adaptacion al frió es una de sus propiedades, es una de las razas que aguanta muy bien el frió, mientras razas de producción cárnica mas elevada no tanto, llegando a sobrevivir en condiciones en las que otras razas mueren. Son animales muy lonjevos, aunque por propia experiencia he comprobado que no es muy rentable tener en una ganadería hembras mayores de 13 a 15 años ya que se resienten mucho.
En cuanto a los sementales machos tienen un desarrollo mas lento que el cruzado del charoles, pero son animales de buenas hechuras y llegan a coger gran peso. En la actualidad el ganadero suele buscar aquel semental bajito de patas y con grandes hechuras, lo que le permite tener crías de mayor rendimiento. Suelen nacer con un peso que varía entre los 50 a 70 kilos, dependiendo de la genética de los progenitores. En cuanto a la paridera suele ser muy buena, rara vez necesitan ayuda a la hora de parir.
El cruce que actualmente se suele producir es el cruce de raza pura negra avileña con machos de raza charolesa debido a que son animales de mayor desarrollo, con mayores hechuras y que su productividad es mayor. En los tiempos que corre y debido al mercado el ganadero se ha visto en la situación de disminuir su cabaña de raza pura e ir sustituyendo por hembras cruzadas debido a la rentabilidad de su carne.
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